El otro : ese del lado… (De un poema de Robert Gélis)

Vivir en una ciudad multicultural como Montreal es un desafío a la tolerancia. Tantas maneras de habitar el mundo ofrecen otras tantas posibilidades de malentendidos y de riñas.


LUISA OLAYA

Somos sociables por naturaleza. Pero el círculo de personas que apreciamos y frecuentamos es cerrado : la familia, los amigos cercanos y de pronto uno que otro vecino. Una cosa es coleccionar cientos de amigos en Facebook y otra la verdadera vida.

Me parece que es más fácil establecer simpatías con los vecinos en un pueblo. Las ciudades nos empujan a replegarnos más, a refugiarnos en nuestro pedazo de mundo conocido.

Montreal es una colcha de retazos

Vivir en una ciudad multicultural como Montreal es un desafío a la tolerancia. Tantas maneras de habitar el mundo ofrecen otras posibilidades de malentendidos y de riñas entre vecinos : los olores de mi comida; la música que escucho y la hora en que decido escucharla; mi idea de lo que es la higiene y la organización. ¡Puedo hacer una larga lista de cómo puedo incomodar a los otros y viceversa!

Civismo y respeto

Muchas veces los problemas no son ni siquiera de valores. Parece que acomodarse entre vecinos en cosas tan simples como los olores, los ruidos cotidianos y el uso del espacio puedo volverse un desafío. Por eso cuando la comunicación se corta es mejor buscar ayuda. En todo Quebec existen diferentes organismos que se dedican precisamente a la mediación social que también se llama justicia alternativa.

Antes de enredarse la vida y el bolsillo con un abogado, los organismos de Justicia Alternativa nos ayudan a ponernos en los zapatos del otro y a ceder un poquito o mucho dependiendo del caso. La información completa está en el sitio de la ROJAQ (www.rojaq. qc.ca).

Le Centre de Formation Sociale Marie-Gérin-Lajoie

Este es un organismo que conozco bien. Además de ofrecer talleres para los organismos comunitarios, tiene un curso de introducción a la comunicación no violenta dirigido al público en general. Creado en 1996 por una comunidad religiosa (Les soeurs de bon conseil) el centro de formación se convierte en organismo sin ánimo de lucro desde 2002. Desde entonces la promoción de la cultura

de la paz es una de sus misiones primordiales. He visto en acción varias de sus trabajadoras, para quienes la buena comunicación es como una segunda naturaleza. Con ellas uno se siente escuchado, comprendido y queda uno convencido que nunca es tarde para aprender otras maneras de vivir mejor en sociedad.

Para seguir en el tema, dejo un poema que hace reflexionar :

Portrait de l’autre

L’Autre :

Celui d’en face, ou d’à côté, /Qui parle une autre langue /Qui a une autre couleur,/Et même une autre odeur / Si on cherche bien … /L’Autre : / Celui qui ne porte pas l’uniforme / Des bien-élevés,

Ni les idées / Des bien-pensants,

Qui n’a pas peur d’avouer / Qu’il a peur … / L’Autre : / Celui à qui tu ne donnerais pas trois sous / Des-fois-qu’il-irait-les-boire, / Celui qui ne lit pas les mêmes bibles, / Qui n’apprend pas les mêmes refrains … / L’Autre :

N’est pas nécessairement menteur, hypocrite, / vaniteux, égoïste, ambitieux, jaloux, lâche, / cynique, grossier, sale, cruel… / Puisque, pour Lui, l’AUTRE …C’est Toi

Robert Gélis (“Poèmes à tu et à toi”)